Inteligencia

Identidad social: Características y Ejemplos

Escrito por Dia García

La teoría de la identidad social es una contribución de Henri Tajfel (1979) quien propuso que los grupos (por ejemplo, clase social, familia, equipo de fútbol, ​​etc.) a los que pertenecían las personas eran una fuente importante de orgullo y autoestima.

Es decir, los grupos nos dan un sentido de identidad social, nos hacen sentir que pertenecemos a algo de este mundo. Así, dividimos el mundo entre “ellos” y “nosotros” a través de un proceso de categorización social.

Todas las personas, lo quieran o no, pueden ser categorizadas. Por nuestros intereses, nuestra raza, posición social o creencias, podemos encajar en un grupo y naturalmente lo haremos.

Características de identidad social

Los grupos de identidad social generalmente se definen por algunas características físicas, sociales y mentales de los individuos. Veamos cada caso.

Características físicas

Las características físicas son aquellas que pueden ser notadas a simple vista y palpadas. Las personas pueden unirse en grupos y compartir pensamientos si comparten características físicas.

Un ejemplo de esto son las personas curvilíneas, que buscan cambiar lo que consideran prejuicios con respecto al cuerpo femenino, buscando que el mundo de la moda se enfoque más en las mujeres “reales”. Estos grupos pueden identificarse fácilmente en redes sociales por etiquetas como la de cuerpo positivo.

Por otro lado, para nadie es un secreto que existen muchas personas que sienten fascinación por los cuerpos delgados. Pero también están los grupos de personas que pasan buena parte de su vida en un gimnasio y están dedicadas al fitness.

Entre las características físicas también se encuentra el color de piel (que también pasa a ser una característica social), la estatura, los rasgos faciales y el tipo de cabello. Por ejemplo, el cabello rizado o afro tiene muchas connotaciones de grupo, muchas personas más que un rasgo físico lo consideran una herencia de sus antepasados afrodescendientes, por lo cual debe ser motivo de orgullo.

Así, cada rasgo físico puede convertirse en parte de la identidad de una persona, uniéndose con todas las demás personas que comparten ese mismo rasgo.

Características sociales

Nuestro mundo está especialmente polarizado por los grupos sociales, no es del todo agradable pero sí es natural desde el punto de vista de la psicología, o al menos desde el punto de vista de esta teoría; pues nuestra mente categoriza todas las cosas, así que inevitablemente nos posicionamos en alguna categoría en términos económicos y sociales.

Primero identificamos a que categoría pertenecemos y luego naturalmente pasamos a formar parte de un grupo social. Dentro de las características sociales, la primera que se nos ocurre es la clase social, pero va mucho más allá de eso.

Encontraremos afinidad con personas de acuerdo a nuestro tipo de personalidad, gustos y preferencias. Esto determinará cómo nos comportaremos en sociedad y cuál será nuestro grupo.

La forma más fácil de comprender la identidad social por características sociales es ver las clásicas películas adolescentes de secundaria, que suelen ser un calco de la realidad. Las personas populares son las que tienen buena posición económica junto con otros privilegios. Pero en la línea de fondo podemos ver que todo está categorizado por grupos sociales, están los deportistas, las porristas, los mate-atletas, los interesados por las artes, etc.

Así, en sociedad, las personas se agrupan de acuerdo a sus gustos, posición y privilegios. Los grupos sociales sin embargo pueden ser más flexibles que los de otras características. Es decir, una persona de clase social alta, puede, si quiere, hacer grupo con personas de otras clases sociales si encuentra otras características que les conecten.

Características mentales

Dentro de las características mentales puede estar el nivel de educación, acceso a cierto tipo de información, creencias religiosas, preferencias políticas y más. Las personas se unen en grupos porque comparten ideas y pensamientos a fines.

Así por ejemplo, las personas que creen que un país funciona mejor con economías abiertas, se consideran liberales, mientras que quienes defienden el bien y la repartición común, se consideran comunistas y ven como “los otros” a los liberales.

Lo mismo puede suceder en las religiones, en las ramas de estudio o incluso en las percepciones filosóficas del ser. Las personas llegan a conclusiones determinadas sobre ciertos temas y se unen con aquellas que han llegado a las mismas conclusiones.

Pertenecer a un grupo por características mentales puede ser muy gratificante, en comparación con los grupos anteriores. Las personas en estos casos no se sienten como un ente aislado, el compartir ideas les ayuda a funcionar en sociedad.

Esto lo vemos con más claridad en las personas que forman parte de la sociedad de la Tierra plana. Hace algunas décadas era descabellado pensar en tal idea y cualquiera que lo afirmara sería plenamente ignorado ante la evidencia científica abrumadora. Pero ahora, miles de personas han llegado a la misma conclusión y han creado un grupo con una idea muy definida.

Ejemplos de grupos internos y externos

Según esta teoría, los grupos internos son aquellos a los que pertenecemos y los grupos externos son aquellos con los que no nos identificamos y podemos discriminar.

  • Irlanda del Norte: católicos – protestantes.
  • Ruanda: hutus y tutsis.
  • Yugoslavia: los bosnios y serbios.
  • Alemania: judíos y nazis.
  • Política: laboristas y conservadores.
  • Fútbol: Barcelona y el Real Madrid.
  • Género: hombres y mujeres.
  • Clase social: clases media y trabajadora.
  • Edad: adolescentes y ancianos.
  • Cuerpo: delgados y gordos.

La identidad social no es una suposición superficial, es una parte real, verdadera y vital de la persona. Todos de alguna manera pertenecemos a un grupo.

Acerca de

Dia García

Licenciada en Letras mención Historia del Arte, escritora creativa e investigadora con buena experiencia en escritura web.