Los perros juegan un papel muy importante en la salud mental de las personas, según el escritor Will Tottle. Muchas personas se conectan con el mundo exterior únicamente a través de los perros, en parte porque solo pueden confiar en sus mascotas.
En ese orden, se ha demostrado que los perros pueden ayudar a tu salud mental, y aquí mencionamos algunos problemas que pueden aliviar.
Ansiedad
Abrazar a su perro libera oxitocina en tu cuerpo, y esta es la hormona que disminuye la presión arterial, la frecuencia cardíaca y te ayuda a tranquilizarte. Lo mismo sucede cuando te tomas un tiempo para acariciarlo.
Así que si eres una persona muy ansiosa o ya de por sí has sido diagnosticado con el trastorno de ansiedad, entonces tal vez necesitas tener a un perro que abrazar y acariciar. Te sentirás más aliviado y tendrás mejor cabeza para pensar en las verdaderas situaciones que están pasando en el presente.
Depresión
Los perros exigen una rutina diaria que va desde ser alimentados hasta ser paseados y bañados. También necesitan jugar al aire libre. Así que cuando no tienes ánimos de cuidar de ti mismo, cuidar de un perro puede ser muy gratificante y puede ayudarte a reconectarte con las pequeñas cosas de la vida.
Jugar con el perro puede levantarte el ánimo, porque son muy graciosos y te motivan salir al aire libre y reintegrarte a la vida. Si necesitas que te levanten de la cama, un perro es el amigo más indicado para hacerlo.
Trastorno límite de la personalidad
El amor de los perros es incondicional, sin importar tu estado de ánimo. Cada vez que los necesitas están allí a tu disposición. Además, tienen una naturaleza calmante que te puede aliviar durante los episodios de ira volviendo a conectarte con emociones más equilibradas.
Eso sin contar que pueden ayudarte a alimentar tu sentido del humor. Los perros por naturaleza son muy graciosos y cuando no están haciendo alguna gracia, nos ayudan a aprender de nuevo la emoción y la diversión del juego.
Trastorno por estrés postraumático
Está comprobado que los perros son una forma efectiva de terapia para estrés postraumático. La compañía de un perro puede hacerte sentir más seguro y te puede alertar al mismo tiempo de los verdaderos peligros. La oxitocina que se libera al acariciarlo además genera calma y una sensación de paz que necesitas para salir adelante. Además, los lazos de confianza con el resto de las personas pueden ser restaurados, pues un perro te enseña a confiar desde cero.
De esta manera, la compañía canina ayuda más de lo que muchos pudieran imaginar. Se crea un vínculo bastante fuerte que ayuda a equilibrar las emociones y a mantener la mente en sintonía con el entorno. Así que si estás pasando por un momento difícil, tal vez necesites abrazar y acariciar a un perro cuanto antes.
